LOS 10 IMPRESCINDIBLES DE AMBERES

¿ La joya de Flandes se ha quedado fuera en tu viaje a Bélgica? Esto es más común de lo que supones, mucha gente cree que con Bruselas, Brujas y Gante ya lo han visto todo.

Sin desmerecer a ninguna de estas tres ciudades, quiero acercarte a otra de mis favoritas: Amberes,  Antwerpen en flamenco.

La llamada joya de Flandes es una gozada de principio a fin. No solo por la abundancia de manifestaciones artísticas de todo tipo que posee. Ni por su monumental puerto fluvial junto al  río Escalda,  uno de los más grandes de Europa.  O por ser la segunda ciudad más poblada de Bélgica.

Creo que lo mejor de Amberes es su ambiente multicultural y diverso. La combinación de elementos tradicionales y modernos ha convertido esta ciudad en un referente de moda, diseño, arte y fusión.

Sin perder de vista los diamantes, la cerveza, los mejillones y las frites, ha sabido desarrollar un ritmo propio muy interesante, que la diferencia de las otras.

Dicen que el civismo se representa en las ciudades por el trato a los animales y la integración de los espacios verdes. En  Amberes puedes ir con tu perro a todas partes y siempre vas a encontrar patios y rincones llenos de plantas naturales. Civismo al cuadrado.

Habiendo, como hay, mucho para ver, quiero destacar estos 10 sitios imprescindibles en tu primera visita.  Como abundan  los museos, voy a agruparlos así puedes elegir según preferencias y tiempo disponible.

Bienvenido a la joya de Flandes, la fantástica Antwerpen,  una ciudad que brilla con luz propia.  A la que no puedes pasar por alto en tu viaje a Bélgica.

ESTACIÓN CENTRAL DE AMBERES, LA CATEDRAL DEL FERROCARRIL

Una de las mejores maneras de llegar a la ciudad, es en tren desde Bruselas, separadas por solo 55 km.

Aparte de resultar lo más cómodo, la Antwerpen-Centraal Station te dejará pasmado. Está considerada una de las cuatro estaciones de tren más bonitas del mundo y sin duda, lo es.

ESTACION DE TREN

Inaugurada en 1905, la enorme cúpula de 75 m que cubre el edificio, su interior de mármol y la profusión de columnas, son apabullantes. No en vano se la conoce como la “catedral del ferrocarril”, porque se parece a un templo y no a una terminal ferroviaria. Una gema más en la corona de la joya de Flandes que, inevitablemente, te trae a la memoria a Harry Potter camino del colegio.

Espectacular a la vista, es mejor no escarbar mucho en su historia. El dinero para construirla, durante el reinado del cruel Leopoldo II, tiene su origen en los diamantes extraídos del Congo Belga.

EL BARRIO DE LOS DIAMANTES, MONEY, MONEY

A la izquierda de la estación central, se extiende el Barrio de los Diamantes.

En una ciudad por la que pasa más del 80% del comercio mundial de estas piedras preciosas, no extraña que haya todo un barrio dedicado al negocio. Por aquí verás muchas medidas de seguridad, más policía y hasta vallas en algunos sitios. Teniendo en cuenta el volumen de dinero que se mueve diariamente, no es nada raro.

Fueron los judíos en el siglo XV, muchos de ellos expulsados de España, los que empezaron con esta tradición. Verás unos cuantos por el barrio, sobre todo ortodoxos con su look característico.

DIAMANTES

Amberes es la capital mundial del diamante, no hay más que ver la cantidad indecente de joyerías que pueblan estas calles. Y aún está lo que no se ve, las grandes bolsas donde se comercian al por mayor y los talleres de tallado.

Te gusten particularmente o no, es muy interesante todo el proceso al que se puede acceder en algunos establecimientos. Eso sí, intentarán seducirte a la salida para que te lleves un recuerdo en forma de diamante. Tú mismo.

No deja de ser una perfecta sincronía, las gemas más valiosas están en la joya de Flandes.

AVENIDA MEIR, LA GRAN VÍA DE AMBERES

Es la gran avenida de Amberes que te lleva directamente al casco histórico, plagada de tiendas de marca y tremendamente cosmopolita. Un detalle más que la diferencia de Brujas o Gante.

Tiene varios edificios interesantes, como el antiguo Palacio Real, hoy conocido como el Palacio de la Meir. Aunque fue morada de grandes nobles, incluido Napoleón, ahora está habitado por golosos atraídos por el chocolate. Como sabes, éste es otro de los clásicos belgas, y la famosa tienda Line tiene su sede principal aquí. De hecho, la antigua cocina de palacio es ahora el taller de producción chocolatera. ¡Vaya nivel!

MEIR AV.

También se puede ver la Torre Boerentoren, un edificio art decó construido después de la I Guerra Mundial, considerado el primer rascacielos europeo.

Aprovecha tu paseo por la Meir para probar otra especialidad nacional, los gofres, generalmente vendidos en puestos callejeros. No digas luego que no te he avisado.

RUBENSHUIS, LA CASA MUSEO DE RUBENS

Pedro Pablo Rubens no solo fue el pintor más famoso de su época, sino también un destacado diplomático y hombre de negocios. Mimado por los reyes, tuvo una gran influencia en la ciudad y en las cortes europeas.

La casa donde vivió junto a su familia en la joya de Flandes, era también el taller donde enseñaba a sus alumnos y creaba sus obras. Si bien es un museo, permite atisbar la vida privada del genio.

La visita es un placer para los amantes del arte, los dos pisos del edificio albergan muebles y lienzos originales como en una galería. Uno de los cuatro únicos autorretratos del artista se expone aquí, además de obras de otro insigne amberino,  AntonVan Dyck.

RUBENSHUISEl jardín de estilo italiano, poblado de estatuas, es un rincón especial para la inspiración. Cabe pensar que aquí encontró parte de ella el gran maestro y que ahora podemos compartir un poco de su espíritu.

CATEDRAL DE NUESTRA SEÑORA EN LA GROENPLAATS

El monumento por excelencia de la joya de Flandes es la Catedral de Nuestra Señora. Un imponente e impresionante edificio religioso gótico, el más grande y bello de Bélgica, que tardó cerca de 170 años en construirse.

Aunque haya que pagar la entrada, su visita es imprescindible, no solo por la arquitectura, sino porque guarda algunos tesoros de Rubens. Como, por ejemplo, el Descendimiento de la Cruz, una de sus obras maestras, y otros tres lienzos más, todos ubicados en el lugar para el fueron creados. Las vidrieras también son dignas de contemplarse, llenas de vida y color.

La importancia de la religión católica en Amberes, está marcada por su pertenencia a los Países Bajos Españoles. Se nota en muchos aspectos de la cultura y también en la cantidad y calidad de iglesias que puedes encontrar en la ciudad. Entre ellas hay que destacar la de San Carlos Borromeo y la de San Pablo, ambas con amplia presencia de obras de Rubens.

En la vertiente sur de la catedral se abre la encantadora Goenplaats, con sus terrazas siempre animadas girando alrededor de una estatua. Es la que representa al hijo predilecto de la ciudad, Rubens, que parece compartir café con sus vecinos y admiradores. Lo curioso es que el pintor no nació en Amberes, pero sí su madre, y él vivió en la ciudad sus últimos 29 años.

GROEN PLAATS

La zona de alrededor está plagada de callejones medievales a cuál más pintoresco. Todos ellos llenos de restaurantes, tabernas y lugares donde hacer una breve parada en la apretada agenda del turista. No te los pierdas.

GROTE MARKT, EL CORAZÓN DE LA JOYA DE FLANDES

Todas las ciudades tienen un corazón y el de Amberes late en la Grote Markt. Si bien la Grand Place de Bruselas está considerada como la más hermosa del país y quizás de Europa, ésta no tiene nada que envidiarle.

Dos de los tres lados (tiene forma triangular), están ocupados por los fotogénicos edificios gremiales, que dan mucho juego en el insta. En el tercero brilla el Ayuntamiento renacentista, un imponente edificio que ha sido inspiración para muchos otros. Figura en la lista del Patrimonio Mundial de la Unesco y fue construido en 1560.

AYUNTAMIENTO

En medio de la plaza, otro icono de la joya de Flandes, la fuente que simboliza el mito fundacional de la ciudad. Está dedicada a un centurión romano, Silvio Brabo, pillado en el momento de lanzar la mano cortada de un gigante. El chicarrón se llamaba Antigoon y se dedicaba a cobrar peaje y aterrorizar a todos los que pasaban por el río Escalda. Justamente, Antwerpen quiere decir “lanzar la mano”. En flamenco, claro.

Mi consejo es sentarte a degustar una deliciosa cerveza local, otra especialidad y van…, mientras ves el trasiego de la gente y las bicis. Es como un teatro viviente, lleno de color y movimiento, mucho más si tu visita coincide con un domingo por la mañana, día de mercado.

EILANDJE, EL BARRIO DE LOS MUELLES

Las ciudades con puerto tienen una magia especial. No importa que, como en este caso, el mar esté a 80 km y los barcos atraquen en el río Escalda (Scheldt, en flamenco).

En la Edad de Oro, con los Países Bajos como centro de la economía mundial, el tráfico de este puerto manejaba cifras descomunales. Como ejemplo, era 4 veces mayor que el de Londres y 12 veces más que el de Sevilla. Y éste último era por el que entraban todos los productos de las colonias en Sudamérica, nada menos.

Actualmente, es el segundo puerto en tráfico de toda Europa, después de Rotterdam.

La zona de los antiguos muelles empezó a renovarse hace algunos años y está en plena expansión. Los viejos hangares se mezclan con las modernas torres de viviendas, los bares de verano y multitud de mercadillos.

Autoridad Portuaria

Esa fusión entre pasado y modernidad, encuentra su zénit en el edificio de la Autoridad Portuaria de Amberes. obra póstuma de Zaha Hadid. Es absolutamente sorprendente cómo se ha logrado combinar una construcción del siglo XIX , con un volumen de acero y cristal flotando sobre él. Siempre siguiendo la norma para cualquier edificio de Amberes: nunca debe sobrepasar los 123 m de altura de la catedral.

HET STEEN, EL CASTILLO DE AMBERES

Cualquier ciudad europea que se precie tiene que tener un castillo. Y la joya de Flandes no puede ser menos. Éste es el edificio más antiguo de la ciudad, de principios del siglo XIII, y ha reabierto sus puertas recientemente después de una exhaustiva restauración.

Situado en el puerto, sobre el río Escalda, se utilizó como fortaleza militar para frenar las incursiones vikingas en época medieval. Ahora alberga el Antwerpen Story,  un espacio donde podrás conocer la historia de Amberes de una forma sorprendente y original. El recorrido finaliza en la azotea del Het Steen, desde donde se disfrutan unas vistas fantásticas del puerto y la ciudad.

HET STEEN

Al entrar, te recibirá la estatua del gigante Wapper, que, según la leyenda, aterrorizaba al pueblo en el medioevo. Salúdalo con educación, por las dudas, no sea cosa que resulte cierta la historia.

SINT-ANDRIESKWARTIER, EL BARRIO DE LA MODA

Cuando pensamos en ciudades top de la moda en Europa, lo primero que viene a la cabeza es París, Londres o Milán. Pero el pulmón fashion del continente se ha trasladado a Amberes, conocida como la academia de moda europea.

El barrio de San Andrés es el epicentro de esta explosión, que empezó en 1987. En ese momento, un grupo de diseñadores locales presentaron en Londres una exposición que los elevó a los altares. Eran «los Seis de Amberes», y uno de ellos, Dries Van Notten, se convirtió en el pope del grupo.

Su tienda, en la Nationalestraat 16, es una joya arquitectónica que no envidia nada a los grandes edificios históricos. Por lo tanto, hay que verla.

BARRIO DE LA MODA

También en esta zona tiene su sede el MoMu, el museo de la moda con colecciones y piezas únicas. Aunque lo mejor está en el barrio mismo, pletórico de vida y estiloso a más no poder.

Incluso la Virgen María, en la iglesia de San Andrés, va vestida a la última por una diseñadora amberina. Increíble, pero cierto.

MUSEOS DE AMBERES, MUCHOS Y BUENOS

Aquí toca elegir si no dispones de tiempo, porque la joya de Flandes esconde numerosos museos, algunos muy interesantes. Además de la Rubenshuis y el MoMu, en este enlace te dejo la información de todos ellos, aunque me gustaría destacar otros de mis favoritos.

Si tuviera que quedarme solo con un uno, sería sin duda el Platin-Moretus, el único museo declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Es que, en esta preciosa mansión renacentista flamenca, sobrevive desde el siglo XVI, la mayor imprenta de Europa en esa época. Para cualquier amante de los libros, esto es el Edén. Aquí se conservan las dos prensas más antiguas que existen y es desde donde salieron las primeras obras en serie del planeta. Por no hablar del valor incalculable de su biblioteca, nutrida de ejemplares únicos.

MAS MUSEUM

A pesar de que el museo MAS figura siempre entre los mejores, sobre todo por su vanguardista arquitectura, yo me quedo con el Red Star Line. El gran museo de la emigración es el reverso del de Ellis Iland, en Nueva York. La historia contada desde el otro lado, las razones que llevaban a mucha gente a dejarlo todo por un sueño. Para ser consecuentes, funciona en un enorme almacén de la zona portuaria de Amberes y es interesantísimo.

Estos son mis 10 imprescindibles para conocer Amberes, una ciudad a la que hay que darle la oportunidad de mostrarse.  Cuanto más tiempo tengas, más podrás ver, pero no dejes de visitar la joya de Flandes, te encantará.

¡Buen viaje!