Todos los viajeros del mundo estamos atentos para ver qué va a pasar con el tema de la salud en los viajes. Estamos atentos a la apertura de fronteras y la vuelta a la nueva normalidad después de la pandemia mundial sufrida por la Covid-19.
Y muchos otros se han dado cuenta que han dejado pasar muchos de los viajes que deseaban hacer, por no sacar tiempo o dinero para ello o simplemente no se atrevían. Y ahora no sabemos cuándo podremos hacerlos, y están deseando escaparse a ese paraíso escondido en la otra punta del mundo.
Lo que es cierto es que las líneas de salida están concentradas de viajeros ilusionados por poder descubrir nuevos mundos y culturas.
Quizá ya eres un experto viajero internacional y este artículo no te cuente nada nuevo, pero si eres de los que empieza a viajar debes saber que entre tus preparativos para los viajes debe estar la salud.
El coronavirus será una mas de las cosas a tener en cuenta a la hora de preparar un viaje. Pero hay muchas otras cosas a las que estar atento en cuestión de la salud cuando se trata de viajes, especialmente si es un país tropical o con condiciones sanitarias más desfavorables.
En las últimas décadas, el número de personas desplazándose por el mundo entero sufrió un incremento brutal. Esto sumado al aumento de la rapidez con que se realizan estos desplazamientos ha provocado que muchas personas estén en contacto con todo tipo de enfermedades infecciosas. A la vista están los resultados. De una ciudad en China donde se inició la pandemia, estamos todos hasta el cuello a nivel global.
Por ello debes informarte correctamente para conocer los riesgos de salud a los que te puedes enfrentar en los viajes y poder adoptar las medidas preventivas adecuadas.
La OMS (Organización Mundial de la Salud) tiene como objetivo, entre otros, prevenir la propagación de enfermedades. Para ello tiene una serie de recomendaciones según de qué país vengas y hacia qué país vas. Unas son normas generales y otras son de obligado cumplimiento en determinados países.
Aún no tenemos claro cómo quedará el asunto del Covid-19 a largo plazo y la normativa aún es muy cambiante según la evolución de la pandemia en cada país. Por el momento, en Europa, se está vacunando masivamente a la población y se está expidiendo un pasaporte europeo covid con el que, según la vacuna que lleves puesta, podrás acceder a unos países u otros, según determinen.
Prometo actualizar el artículo una vez quede claro todo este tema, porque ahora mismo debería actualizarlo casi cada día. De momento, y dejando un poco de lado el tema pandemia te cuento lo que deberás tener en cuenta en cuanto a salud se refiere cuando decidas viajar a otro país.
Entre los preparativos de un viaje a un lugar exótico o tropical uno de los principales es informarse de la situación sanitaria del país de destino. Debes informarte de las medidas preventivas que hay que adoptar, puedes hacerlo en los Centros de Vacunación Internacional. Hay uno en cada ciudad, los puedes localizar a través de una búsqueda común y solicitar cita para que te informen de los pasos a seguir según el itinerario de tu viaje.
En estos centros se ofrece información individualizada sobre las vacunas obligatorias y recomendadas según destino. Información para la prevención de riesgos relacionados con alimentos y bebidas y con el entorno, como propagación de enfermedades por picaduras de mosquitos. Y consejos para prevenir enfermedades de transmisión sexual, que nunca están de más este tipo de consejos que sirven a nivel internacional.
Ya estamos muy familiarizados con los efectos de las vacunas, por lo que ya sabemos que algunas de ellas, tanto obligatorias como recomendadas, deben suministrarse hasta un mes antes de la llegada al destino para que ésta sea efectiva. Por tanto, la visita a estos centros debe hacerse con tiempo solicitando cita previa. Aquí los que nos gusta improvisar los viajes lo tenemos algo más crudo.
Si tienes que seguir algún tratamiento médico deberás llevar la cantidad suficiente de medicación para cubrir el periodo de tiempo de tu viaje o asegurarte que podrás conseguir la medicación en el país de destino. Incluso informarte sobre la legalidad del medicamento en cuestión en el país a visitar. Lo que aquí es una medicina común en otro país puede estar considerado droga y solicitarte un documento para justificar su transporte, como una prescripción médica o la receta.
Yo diría que es esencial tener un seguro de salud para viajar, hay muchos pero debes buscar uno que te cubra lo máximo posible. Lo normal es que no pase nada, y mejor no tener que utilizarlo, pero todos nos transformamos un poco en los viajes y hacemos cosas que en nuestro día a día no haríamos jamás. Como algún deporte de riesgo tipo buceo o tirolina. Así que lee bien la letra pequeña y asegúrate de la cobertura que te da.
Independientemente de los casos especiales de medicación o de vacunas lo que no puede faltar cuando te vas lejos de casa, es un botiquín con las cosas esenciales. Debes tener cubiertas urgencias relacionadas con males menores que te puedan ocurrir en el día a día de tu viaje. Como los materiales básicos para una cura, analgésicos, antihistamínicos, pastillas para el mareo, antidiarréicos, protectores solares adecuados y repelentes de insectos. Con esto y un buen seguro, ya tendríamos que viajar más que seguros a nuestro lugar de destino.
Consejos extra, si prevés que te puede venir la regla durante el viaje, lleva todo lo que necesites de higiene íntima. También, si prevés encuentros sexuales lleva preservativos suficientes, ya que en según que destinos no es tan fácil encontrar estos productos.
Los problemas más comunes que se dan en cuanto a salud durante un viaje vienen derivados sobre todo de la alimentación o del agua. El síntoma mas frecuente es la diarrea, y corremos el riesgo de enfrentarnos a una deshidratación. Para prevenir procura mantenerte hidratado, bebe agua en abundancia aunque no tengas sensación de sed. Será más difícil deshidratarte en caso de que la diarrea llame a tu puerta (de atrás).
Para prevenir estas intoxicaciones, hay que:
Otra cosa a tener en cuenta con respecto a la comida, es que muchas veces la vemos como un souvenir perfecto para llevarlo a nuestras familias. Incluso pensamos que algún producto podemos echarlo mucho de menos durante nuestro viaje. Asegúrate que no te pararán en el control del aeropuerto por este motivo. En ocasiones los alimentos son fuentes de infecciones y las aduanas son tremendamente estrictas con estos temas.
En ocasiones, en lugares muy remotos, nos vemos en la tesitura de tener que consumir agua que puede ser peligrosa para nuestro bienestar. Te dejo algunos trucos básicos para tratarla y consumirla con tranquilidad.
Una de las causas más relevantes a sufrir algún problema de la salud en los viajes, viene dada por factores climáticos.
De lo más común que nos puede pasar en un viaje, es una insolación. Cuando viajamos pasamos mucho tiempo al aire libre y una larga exposición al sol, puede fastidiarnos unos cuantos días de nuestro viaje. Para evitar insolaciones hay que llevar siempre protección solar, una gorra o sombrero y gafas de sol. Beber agua en abundancia para evitar la deshidratación y poder regular mejor nuestra temperatura corporal es imprescindible.
Además si al calor le sumas otro factor externo como es la humedad del ambiente, se convierte en la combinación perfecta para provocarnos una infección por hongos en la piel. Así que mantener una buena higiene con duchas frecuentes y mantenernos secos el máximo tiempo posible nos evitará estos molestos problemas cutáneos.
Especial atención a quienes padezcan algún tipo de alergia ambiental o tengan tendencia a poder sufrirla ocasionalmente. Cuando viajamos estas alergias suelen agudizarse, por lo que evita el contacto con ciertas plantas, o lugares cerrados llenos de polvo, o ciertos insectos que puedan provocarte una reacción alérgica.
Los insectos, especialmente los mosquitos son los principales vectores de contagio de enfermedades. Para prevenir las molestas picaduras, además de un repelente de mosquitos es aconsejable vestir prendas de manga larga y pantalón largo especialmente durante el amanecer y el atardecer. Es cuando más disfrutan picando.
Y si puedes, durante la noche, para no levantarte con sorpresas, intenta dormir con una red mosquitera alrededor de la cama. Las hay de viaje que ocupan y pesan muy poco en cualquier tienda de viajes o deportes de aventura.
Un ventilador encendido por la noche también ayuda, y si puedes ponerlo todo mejor que mejor.
Cuando estamos de viaje los aventureros nos mimetizamos rápido con el medio y nos lanzamos a realizar actividades que normalmente no hacemos en nuestro lugar de origen. De los más comunes es bañarnos en ríos, lagos, hacer rutas por lugares empantanados o con barro. Pues bien, el agua dulce puede ser un foco de enfermedades parasitarias, bichitos que se instalan en la piel o debajo de las uñas y te los llevas puestos hasta que se hacen grandes y dan la cara.
Las aguas más seguras para el baño son el mar, aguas saladas y las piscinas tratadas con cloro.
En caso de que en nuestro viaje esté incluida una ascensión a una montaña por encima de los 3000 metros de altitud. Esto puede suponer un problema si no se hace una ascensión progresiva para evitar el llamado mal de altura. Los síntomas son muy molestos pero, lo bueno es que se pasan rápido cuando volvemos a acercarnos a altitud cero. Lo síntomas pueden ser dolor de cabeza, nauseas, pulsaciones disparadas, fatiga, ansiedad o insomnio, y pueden afectar con más incidencia en personas con problemas de corazón o respiratorios.
Es la consecuencia de cruzar muy rápido varios meridianos. Pasamos por diferentes zonas horarias en muy poco espacio de tiempo y nuestro cuerpo y mente se ven alteradas. Los síntomas pueden ser: sufrir trastorno del sueño durante varios días, irritabilidad o fatiga. Podemos evitarlo tratando de ajustar el sueño al lugar de origen. Pero si vamos tarde y ya lo tenemos, podemos combatirlo tratando de dormir durante las horas de la noche del lugar en el que nos encontramos. Es decir, evita siestas, y cabezaditas durante el día y procura cansarte de día para poder dormir toda la noche del tirón.
Estas recomendaciones no son exclusivas de la salud en los viajes, son válidas también en nuestro día a día. El uso del preservativo es el más eficaz contra las ETS, pero esas enfermedades a veces comparten vía de transmisión, por ejemplo cuchillas de afeitar, cepillos de dientes o material de tatuajes y acupuntura. Así que si quieres llevarte un buen recuerdo del viaje como puede ser un tatuaje, asegúrate de la higiene del lugar donde te lo haces.
Ya que nuestra mente no olvida nunca un viaje ni una buena experiencia, tenemos que tenerlo muy presente durante los siguientes 12 meses de nuestro regreso. Algunas enfermedades pueden manifestarse durante todo el año siguiente desde su origen. Así que aunque parezca algo estúpido contarle tu viaje al médico esto puede darle muchas pistas de cualquier síntoma extraño o inusual que puedas estar notando. No te cortes y cuéntaselo todo.
Si nos lees desde España y quieres saber más sobre el asunto, puedes informarte en este enlace.
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