RUTA EN COCHE POR LA ARIÈGE

 

Muy cerca de la frontera española, en la otra cara de los Pirineos, te espera la Ariège. Bendecida por la naturaleza, sembrada de preciosos pueblos medievales, balnearios termales, lagos y montañas, es perfecta para una ruta familiar en coche.

Este departamento forma parte de la Occitania, una de las 13 regiones en que se divide la República Francesa. Recibe su nombre del río Ariège, que discurre en Andorra y Francia durante 163,5 km hasta desembocar en el Garona.

Es, sobre todo, un lugar para desconectar de las grandes ciudades y disfrutar del cuidadísimo paisaje rural francés. En un territorio no demasiado extenso se conjuga una naturaleza espectacular con un impresionante legado histórico.

Para los amantes del aire libre, hay multitud de alternativas. Montañismo, espeleología, vuelo en parapente o barranquismo,  se combinan con innumerables opciones de senderismo, vías verdes y rutas ciclísticas.

Los niños disfrutarán visitando cuevas prehistóricas, castillos de ensueño y peculiares reservas de animales. O navegando por el río subterráneo más largo de Europa.

La Ariège no defrauda a nadie y las actividades o visitas dependerán sobre todo del tiempo que tengas. La ruta que hoy te propongo, desde Bagneres de Luchon a Ax-les-Thermes, es solo una de las muchas que puedes recorrer. Realmente comienza en el Haute Garonne, pero esto no hace más que agregarle encanto.

Personalmente, me parece muy indicada para hacer en familia porque las distancias son cortas, pero con una gran variedad de cosas interesantes para todos. Sus menos de 200 km, discurren por buenas y tranquilas carreteras, con servicios impecables y una  gastronomía deliciosa.

Yo no me lo pensaría dos veces.

¿Nos vamos a la Ariège?

BAGNÈRES DE LUCHON, LA REINA DE LOS PIRINEOS

Como se trata de una ruta en coche por una región fronteriza con España, lo ideal es hacerla con tu propio vehículo. Para llegar a Bagnères de Luchon hay varias opciones, pero mi favorita es a través del Valle de Arán.

Desde el pueblo de Bossòst, junto al río Garona, puedes acceder a Francia a través del mítico puerto del Portillón. Una buena manera de empezar tu ruta, entre un espeso bosque de abetos. Nada más iniciar el descenso hacia el lado francés, hay un cambio sutil. Pareciera que la naturaleza, que no entiende de fronteras, se vuelve menos salvaje, más acomodada a los pasos del hombre.

Pocos kilómetros después llegarás a Luchon, como también se la conoce. O mejor “la reina de los Pirineos”. Es un delicioso anacronismo con forma de ciudad, muy al estilo Belle Èpoque, que conserva toda la magia y la arquitectura de esa época.

Las Alamedas de Etigny y el barrio de las Termas, en el magnífico parque de Quinconces, son los corazones de Luchon. Aquí se dan cita las villas más refinadas, los palacetes perfectamente conservados, el Casino y el Gran Teatro.

Parc Thermal

Para recorrerlo con los niños, hay una excelente opción, el Petit Train, con salida desde el Parque Termal y 5 itinerarios diferentes.

Por supuesto, Luchon es, sobre todo, sus baños termales, famosos desde la época de los romanos. La principal atracción está en el Vaporarium, un inmenso baño turco natural, único en Europa.

También para los amantes de la montaña, esto es el paraíso. Existen más de 400 km de senderos señalizados, para pasear o de larga distancia, así que tendrás donde elegir. Lagos como el de Oô, uno de los más hermosos de los Pirineos, tienen fácil acceso desde Luchon. Y no me olvido de Superbagnères, la estación de esquí a la que puedes llegar en telecabina desde el mismo centro de la ciudad.

SAINT BERTRAND DE COMMINGES, MEDIOEVO PURO

A unos 35 km hacia el norte, por la Nacional 125, no podrás resistirte a conocer uno de los pueblos más bonitos de Francia. Con 2000 años de historia a sus espaldas, aquí puedes ver desde vestigios de la ciudad romana hasta la ciudadela medieval.

Saint Bertrand de Comminges cuenta también con un tren turístico para acceder a lo alto de la colina. Pero te recomiendo subir por el sendero de escaleras, mucho más bonito. De esta manera podrás observar los restos de la antigua Lugdunum Convenarum, hasta llegar a la imponente catedral de Sainte-Marie. Esta catedral era un importante lugar de paso para los peregrinos que hacían el Camino de Santiago hacia Compostela.

Toda la ciudadela es una verdadera joya medieval, ideal para una caminata que te sumergirá en la magia del pasado.

ST. BERTRAND DE COMMINGES

SAINT LIZIER, LAS HUELLAS DE LA HISTORIA

Enclavado en el corazón de la Ariège, este pueblo figura también entre los más bonitos de Francia. Forma parte del Patrimonio de la Humanidad de la Unesco, como integrante del camino francés a Santiago de Compostela.

Y es sencillamente deliciosa. Conserva un importante patrimonio, con su magnífica catedral del siglo XI, conocida como la Capilla Sixtina de la Ariège. Los frescos románicos que atesora son impresionantes, igual que el campanario octogonal de estilo gótico tolosano. También se puede encontrar en Saint Lizier la farmacia más antigua de los Pirineos, del siglo XVIII, que se usaba también como quirófano.

ST. LIZIER

Pero además de callejear por su coqueto casco medieval, muy cerca encontrarás un sitio peculiar para que los niños disfruten. Para los pequeños exploradores de la naturaleza, se ha creado un parque temático especializado en icnología. Palabreja rara, lo sé, pero que estudia los restos dejados por el comportamiento animal, o sea las huellas, tanto fósiles como recientes.

El Pays des Traces es un sitio perfecto para que adquieran conocimientos de primera mano mientras se divierten. Incluso hay un taller nocturno donde aprender a encender un fuego y hornear pan al estilo nómada. Así mismo, se llevarán de recuerdo una pirografía hecha por ellos en un aro de madera. Un objeto mágico que servirá para mantener viva esta experiencia completamente diferente a otras.

Cerca de aquí, el parque Xploria ofrece la oportunidad de recorrer un sendero de 2 km en pleno bosque para explorar la evolución de la vida. La historia de la fauna y de la flora, desde el big bang hasta la actualidad, diseñado para que todos podamos aprender más sobre la biodiversidad

Consejo de viajero: en la vecina Saint Girons hay mercado los sábados por la mañana. La ciudad en sí no pasa de ser una agradable parada sin más, pero el mercado merece muchísimo la pena. Avisado estás.

FOIX, A LA SOMBRA DEL CASTILLO

Uno de los castillos más importantes de la ruta cátara se levanta en Foix. El catarismo fue un movimiento religioso cristiano, herético frente a la iglesia católica, que se desarrolló en Francia entre los siglos X y XIII. Con la llamada Cruzada Albigense se dio fin a los cátaros, contando con la inestimable ayuda de la corona francesa, en 1209.

Pero la mayoría de los castillos cátaros han sobrevivido en diferentes condiciones. Uno de los mejor conservados es el de Foix, que se alza altivo sobre una colina, dominando la ciudad. Este edificio del siglo X, bellísimo e imprescindible en cualquier recorrido por la Ariège, se ha convertido en el buque insignia de la región.

He conocido muchos castillos a lo largo de mi vida, como profesional del turismo o simple visitante, y pocos me han impresionado tanto como éste. Además de su fascinante historia, ha sido inexpugnable durante siglos, salvo un episodio entre miembros de la misma familia Foix en 1496. Pero, ya se sabe, nadie como un allegado para conocer tus secretos.

Los condes de Foix llegaron a reyes de Navara y de Francia (Enrique IV), fueron acérrimos defensores del catarismo y nunca se rindieron. Ni siquiera ante las tropas reales, lo que ya nos da una idea del carácter que gastaban.

En 2019 se completó la renovación de la sala de exposiciones, y actualmente la visita al castillo es muy didáctica y divertida. El contenido interactivo la hace ideal para los peques, que se la pasan realmente bien entre historias, espadas y armaduras. Entrar en el castillo es meterte de lleno en el siglo XIV, época de gran auge para los condes de Foix, bien representada a través de talleres de todo tipo.

Solo te digo que saldrás de aquí sabiendo operar una catapulta, tallar piedra o disparar una ballesta. No te pierdas las estupendas vistas desde la Torre Redonda, que abarcan Foix y sus alrededores.

En cuanto a la ciudad, es una perfecta muestra de lo mejor de la Ariège, recostada sobre el río y sumamente cuidada en todos los aspectos. Resulta muy bonita y agradable para pasear, destacando entre sus monumentos la iglesia de San Volousien, románica del siglo XII.

Como curiosidad, verás que la bandera de Foix es muy similar a la de Cataluña, pero con una barra menos.

A unos 6 km de la ciudad existe un mundo alternativo, a 60 m de profundidad y con un río subterráneo para navegar. Entrar en Labouiche es viajar al centro de la tierra y recorrer un espacio impensable y mágico

Después de bajar 200 escalones, te esperan las barcas para conocer de primera mano esta fantástica cueva durante un recorrido de 1,5 km. Es un paseo estupendo, muy bien contado por los guías, que deslumbra a toda la familia y sin duda, una experiencia única. No todos los días se puede navegar por el río subterráneo más largo de Europa.

RÍO SUBTERRÁNEO DE LABOUICHE

A tener en cuenta: no recomendable para personas claustrofóbicas, mejor ir con zapatos cerrados y algo de abrigo, la temperatura está en los 13º. Por supuesto, olvídate del wifi, aquí reina el silencio en medio de una increíble variedad de paisajes de gran riqueza geológica.

Totalmente recomendable para grandes y pequeños.

TARASCÓN SUR ARIÈGE, LA MARCA DE LA PREHISTORIA

En medio de un idílico valle y rodeada por los picos pirenaicos, Tarascón es una de las ciudades más interesantes de esta ruta. Tiene los ingredientes necesarios para atraer a cualquier visitante, sobre todo a inquietas familias con niños.

Presidida por la Torre Castella, que se divisa mucho antes de llegar, está llena de monumentos medievales en perfecto estado. Ya sé que éste no es el atractivo principal para los peques, aunque disfruten recorriendo las callejuelas o el paseo sobre el río Ariège. Pero es que en los alrededores hay infinidad de rutas de senderismo, picos a los que subir y cuevas prehistóricas.

TORRE CASTELLA

Lo destaco como un buen sitio para montar la base y desde aquí visitar las muchas atracciones de la Ariège. A solo 3 km encontrarás la estrella de la zona, el Parque de la Prehistoria, donde se recrea la vida de nuestros antepasados cromañones.

No solo disfrutarán los niños, es fantástico para pasar un día en familia. Hay muchos talleres diferentes donde todos pueden aprender a pintar en las paredes de una cueva o encender un fuego con sílex. También a excavar al estilo de los arqueólogos o experimentar técnicas de caza ancestrales.

Todo esto en medio de un parque de 13 hectáreas, que tiene además juegos acuáticos, cascadas, un área de picnic y restaurante.

El segundo espacio es un museo de 2500 m2 donde se recrea el arte rupestre. Te aseguro que te sentirás como un habitante de las cuevas, es una excelente manera de aprender y divertirse.

Si lo que quieres es sumergirte a fondo en la historia de nuestros antepasados comunes, lo mejor es visitar la Cueva de Niaux. Es una experiencia alucinante, dentro de una gruta donde realmente vivieron los cromañones y dejaron muestras de su arte.

Tarascón sur Ariège es un lugar muy particular en el que la prehistoria está presente en todas partes.

AX LES THERMES, TERMAS Y NATURALEZA

La ciudad balnearia de Ax les Thermes, situada a orillas del río Ariège y a 720 m de altitud, es un hermosa parada entre montañas. Tiene más de 70 manantiales, fluyendo a cielo abierto por sus calles, que alimentan a 3 famosos balnearios. Los estanques al aire libre se pueden disfrutar sin condiciones, y es lo que hacen todos los que pasan por aquí.

Ax también es un lugar maravilloso para vivir la naturaleza en cualquier época del año. En invierno, las cercanas pistas de esquí AX3 Domaines te esperan con sus 80 km de nieve, accesibles desde el mismo centro de la ciudad. Es la estación más grande de la Ariège y una de las preferidas por las familias.

VALLE DE ORLU

Por otra parte, la ciudad es la puerta de entrada al Valle de Orlú. El valle es un excepcional enclave natural donde practicar el senderismo, la observación de animales en libertad e incluso, dormir en un refugio. La Reserva Nacional de Vida Silvestre Orlú, permite desarrollar un sinfín de actividades al aire libre en un entorno inmejorable.

Pero hay más, quizás el mejor recuerdo que puedan llevarse los niños de este viaje: La Maison des Loups. En plena naturaleza tendrán lo oportunidad de conocer a estos animales muy de cerca. Porque sin conocer no se puede querer, y eso es lo que pasa con los lobos. No es un zoo, jamás te lo recomendaría de ser así, es un centro con vocación conservacionista. Fundado por iniciativa privada, hoy se ha convertido en un referente a nivel europeo.

MAISON DES LOUPS

El espacio es una maravilla. Además de la observación de los lobos viviendo en semi libertad, hay una mini granja, parque infantil y zona de picnic. No te lo pierdas, por ti y por los peques.

Como colofón, queda recomendar otra atracción muy interesante en la Reserva, un parque de arborismo de los más bonitos y completos que hay. El AKRO branch d’Orlú propone varios circuitos diferentes entre las copas de los árboles, además de barranquismo, escalada o vía ferrata. Todo esto en medio de una naturaleza espectacular, a 950 m de altura. Una estupenda opción de turismo sostenible para familias a las que les va la marcha.

Desde Ax les Thermes, solo unos 60 km te separan de Andorra, una buena manera de regresar a España pasando por el Principado.

Esto es todo por hoy, pero mañana habrá más en Súper Guía Viajera, siempre pensando en ayudarte a viajar más y mejor.

¡Buena ruta!