La capital inglesa suele tener muy buenas ofertas en vuelos si los coges con suficiente antelación. Por ello, es muy probable que un día tu espíritu viajero te impulse a hacer una escapada exprés. Si considerar difícil visitar esta ciudad en poco tiempo puede echar para atrás esta idea, acompáñame en este artículo y déjame que te cuente que ver en Londres en dos días.
Este asunto se decide fácilmente. Londres tiene un precio muy elevado para el uso de transporte público, cuando de viajes únicos hablamos. Por un billete de metro sencillo te hacen pagar 4,9 libras (5,63 €). Sin embargo, si decides comprar una Travel Card para la zona 1-2, el precio es muy asequible. Por 12,7 libras (14,6 €) puedes hacer uso ilimitado de metro y autobús durante 24 horas, lo cual te será muy necesaria tratándose de una ciudad tan grande como lo es Londres.
O mejor dicho, ¿cómo visitar una ciudad tan grande en tan poco tiempo?. Esto va a ser posible gracias a que muchos de los sitios que verás en la lista que te voy a dejar un poco más abajo están muy cerca unos de los otros. Del resto, como decía anteriormente, se va a encargar la maravillosa red de transporte público que conecta prácticamente todos los rincones de la metrópolis.
Como por algún sitio hay que empezar, ¿por qué no hacerlo por este edificio?. No es uno de los lugares que más tradición conserva, ya que su construcción finalizó en el año 2014. Se le conoce con el nombre de «Walkie Talkie» y mide un total de 160 metros. Lo encontrarás en el 1 Sky Garden Walk y te lo recomiendo por la panorámica tan chula que proporciona de la ciudad desde su terraza. Subir a ella es gratuito, pero deberás hacer una reserva previamente por su aforo limitado. Con cuanta más antelación lo hagas, mejor, ya que es uno de los sitios con más afluencia de visitas en la actualidad.
A escasos metros caminando hacia el oeste de la ciudad, te encontrarás con uno de los sitios más destacados por el papel que ha jugado en la historia de Inglaterra. Se considera oficialmente el Palacio Real y Fortaleza de su Majestad. Lo encontrarás al borde el río, justo al lado del Puente de Londres. Actualmente es la encargada de albergar las Joyas de la Corona. Se puede acceder a ella a partir de las 9:00 a.m. y el precio de la entrada general es de 28,7 €.
Como decía, literalmente al lado de la Torre de Londres se encuentra el puente con el mismo nombre. Es muy bonito de ver a lo lejos, porque es uno de los símbolos de la ciudad, pero si te apetece cruzarlo, no se tarda mucho en hacer.
Como estos tres famosísimos sitios de Londres están literalmente pegados el uno al otro, he decidido incluirlos en el mismo apartado. El primero, icono indiscutible de la capital, es el escenario favorito de muchos para capturar sus mejores fotos desde diferentes perspectivas. Los otros dos, a parte de brillar por su majestuosa arquitectura, tiene una alta carga de importancia por la cantidad de eventos históricos que han tenía lugar en su interior. El horario para visitar la Abadía es de 9:00 a 15:00, y cierra los domingos. Por otro lado, el precio de la entrada general es de 20,8 €. A pesar de ser elevado, muchos recomiendan no perderse esta visita si viajas a esta ciudad.
Y ya que andamos por esta zona, en la otra orilla del río encontrarás la famosa noria construía en el año 2000. Con esta atracción ocurre lo mismo que con el Sky Garden, y es que su reciente creación no le resta en absoluto protagonismo entre los turistas. Siendo sinceros, si el artículo trata sobre que ver en Londres en dos días, no considero obligatorio montar en él . Como experiencia, está guay, a pesar de ser bastante cara (32 €).
Si te apetece dar un agradable paseo, te recomiendo hacerlo por uno de los parques más famosos, Green Park. De esto modo, tendrás muy fácil pasar por delante de la casa de la Reina de Inglaterra. Si vas de 9:30 a 18:30 y te apetece pagar 30,6 €, podrás entrar en su interior y recorrer sus lujosas salas. Pero, siendo realistas, basta con estar justo delante a las horas en punto para presenciar el cambio de guardia. En las visitas exprés se trata de llevarse la máxima esencia de la ciudad en el menor tiempo posible.
Y ya que hablamos de parques, hablemos del más importante de la ciudad. Ideal para recorrer algunos de sus tramos en una de las bicicletas que la ciudad te ofrece para alquilar. En navidad, montan una especie de parque de atracciones gigante llamado Winter Wonderland. Si viajáis en estas fechas, llama muchísimo la atención para ir a verlo un rato, ya que la entrada es gratuita. Pero no es oro todo lo que reluce. Los precios en el interior para cualquier cosas están bastantes disparados, y en días como los fines de semana, es imposible entrar de lo abarrotado que está. Al final, lo que iba a ser una visita genial, puede convertirse en un infierno. Lo digo por experiencia.
Una de las zonas más fascinantes de Londres repleta de tiendas, restaurantes y artistas callejeros que te harán pasar un rato estupendo. Cuenta con un mercado enorme, el cual se encargó famoso hace muchos años.
Supongo que si te hablo de un barrio cuyas casas de colores se continúan unas a otras, no dudarás en adivinar de qué sitio te estoy hablando. ¡En efecto!, Notting Hill se hizo muy famoso por la película, pero no solo se ha ganado prestigio en esta ciudad por ello. Si paseas por una de sus calles más importantes, Portobello Road, podrás disfrutar del mercadillo de antigüedades y ropa vintage que ponen los sábados por la mañana. Su espíritu bohemio te atrapará en cuanto asomes tu nariz por allí.
Los siguiente tres sitios están muy cerquita entre ellos, y son tres lugares super fáciles de incluir en tu lista de cosas que ver en Londres en dos días. Este primero, podría considerarse la Times Square londinense. La reconocerás enseguida por la estatua de Cupido que hay en medio de la plaza.
Ideal para hacer una pausa para cenar. Y digo cenar porque este barrio multiplica su encanto cuando enciende sus luces al atardecer. Está repleto de restaurantes asiáticos, así que no tendrás problema para elegir.
Si sigues caminando, llegarás sin darte cuenta al barrio del Soho, limítrofe con Chinatown. En él se encuentra una de las calles más famosas de la ciudad, Carnaby Street. Está llena de tiendas de ropa, así que si te apetece «shopping», esta es tu calle. Pero, como con otros muchos sitios de esta ciudad, la navidad hace auténtica magia. Y este es uno de esos casos. Cada año
Alejándonos un poco del centro de la ciudad, te recomiendo asomarte por le paso de cebra más famoso del Londres. En transporte público se llega enseguida y es divertido acertar a hacerte la foto con un auténtico Beatle cuando nadie más cruza la calle y ningún coche está intentando pasar. Es todo un reto, pero la foto puede quedar chulísima.
Y ya que decidimos recorrer un poco de periferia, la visita a este barrio es la única que te recomiendo de forma encarecida. Es mi barrio favorito de Londres, sin duda. Sus originales fachadas me enamoraron en un segundo. Tengo un recuerdo super agradable recorriendo sus tiendas y del momento en el que paramos a comer. Además, no es un barrio demasiado grande. No te va a quitar mucho tiempo y vas a pasar un rato super divertido.
Solo te voy a hablar de este sitio en este artículo porque necesito que entiendas la gran importancia de visitarlo aunque solo sea una vez en la vida. Necesita un mínimo de 3 horas para recorrerlo debidamente, pero lo ideal sería invertir toda una mañana en él. Obviamente, para ver Londres en dos días, es inviable. Pero si vuelves a la ciudad, apúntate que abre de 10:00 a 17:30 y que la entrada, además, es gratuita.
Soy enfermera y, durante muchos años, he tenido grandes dificultades para juntar días libres (de tener vacaciones ni hablamos). Por eso me he ido entrenando en aprovechar el tiempo al máximo en mis cortos viajes al extranjero. Si, por desgracia, te ves en la misma situación que yo, te dejo un par de ejemplos más como el de Londres para que intentes llevarlos a cabo. En este caso, se trata de Roma y Nueva York. Con ellos, espero haberte ayudado a no perder la fe en seguir conociendo mundo aunque no dispongas de mucho tiempo para hacerlo.
Madrileña treintañera que se dedica a ahorrar todo lo que su sueldo de enfermera le permite para viajar y descubrir este maravilloso mundo en el que vivimos. Y es tal la emoción que siento cada vez que lo hago, que quiero compartir mis experiencias y aprendizajes a través de estos artículos. Espero con ello que cada viajero pueda disfrutar de cada nueva aventura igual o más de lo que lo hice yo.
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