WLLIAMSBURG, DOS BARRIOS EN UNO

DOS BARRIOS EN UNO

Williamsburg es una de las zonas más interesantes de New York, compuesta por dos barrios completamente distintos en pleno Brooklyn.

Cuando llegas a N.Y. por primera vez, el magnetismo de Manhattan no deja espacio para nada más y pocos se atreven a «perder el tiempo» fuera de la isla. Pero la enorme cantidad de turismo que la visita, ha producido un fenómeno bastante habitual: la huida de los residentes hacia zonas más baratas y bien comunicadas. Eso hace que muchos barrios típicos, con su propia idiosincrasia, vayan mutando en mini parques temáticos, como ha pasado con Litte Italy.

La llamada gentrificación tiene mucho que ver con este tema. Los inversores compran a bajo precio, transforman las viviendas y locales, vendiéndolos con grandes ganancias y obligando a los residentes a marcharse.

Esto, que en principio no parece cosa buena, ha impulsado a otras zonas de la ciudad, que reciben a los nuevos vecinos con los brazos abiertos. Muchos de ellos han recalado en distintas áreas de Brooklyn, al otro lado del East River, que registra el número más alto de habitantes de New York. Nada menos que unos 2,6 millones viven en este distrito, algunos agrupados por nacionalidad, otros por cultura y también por religión.

En Brooklyn hay muchas cosas interesantes para ver, pero entre todas destaca Williamsburg, dividida en dos barrios tan diferentes como atractivos. Uno es el más hipster de toda la ciudad, en el otro vive una comunidad judía  ultra ortodoxa .

Juntos pero sin mezclarse, firmemente divididos por el puente de Williamsburg. Al norte habitan los jóvenes intelectuales que prefieren la contracultura, el indie rock y la ropa vintage, cuanto más colorida, mejor. Al sur lo hacen los judíos ortodoxos jasídicos, inmigrantes de Europa oriental que hicieron de este barrio su hogar.

¿Se te ocurre algo más diferente? Esto es New York, una ciudad en la que los contrastes forman parte de su poderoso atractivo, así que no te lo puedes perder, aunque no esté en Manhattan.

LA ZONA HIPSTER, UNO DE LOS DOS BARRIOS DE WILLIAMSBURG

Aquí peregrinaron los más vanguardistas habitantes del Soho, Chelsea o Greenwich Village, aburridos de ver cómo cambiaban sus calles. Y sobre todo, lo carísimas que se volvían.

De estética industrial, la llegada de estos nuevos habitantes propició el desarrollo del arte urbano, preferentemente graffitis, que le dieron otro aire al barrio. A esto se suma la presencia de mucha gente joven, tiendas de autor o pequeños restaurantes temáticos. Y una vida nocturna sin nada que envidiar a la de barrios más famosos.

Todo lo contrario, te diría que es uno de los mejores lugares para elegir hotel en NY, bastante más asequible que Manhattan, perfectamente comunicado y muy cool.

¿CÓMO LLEGAR?

Si tienes tiempo y buenas piernas, lo ideal es atravesar andando el puente de Williamsburg, no tan glamuroso como el de Brooklyn, pero igualmente interesante. Las vistas son muy gratificantes y el paseo merece la pena, aunque la mayoría de turistas no lo sepa.

Otra opción que quizás no te habías planteado, es el ferry, económico, divertido y refrescante. Es una de las mejores formas de desplazarte desde Manhattan para conocer los otros distritos de NY.

Si te decides por el metro, la línea L es la que te llevará a tu destino. Puedes bajarte en Bedford Av. y ahora sí, empezar a callejear y poder ver en directo la diferencia entre los dos barrios de Williamsburg.

¿QUÉ VER?

La arteria principal del norte es Bedford Avenue, literalmente sembrada  locales interesantes. Aquí hay de todo, desde pequeñas boutiques de diseño hasta librerías de viejo, pasando por típicas tiendas de barrio que se mantienen como un tesoro local.

Hasta hace muy poco,  era imposible encontrar grandes cadenas al estilo Starbucks. Sin embargo, esto ha ido cambiando y algunas ya aparecen, eso sí, siempre que encajen con la estética del vecindario. No sé si esto evitará que al final triunfe también la famosa gentrificación, pero es un avance con respecto a otras zonas.

ARTE CALLEJERO

Como te dije antes, el arte urbano es uno de los puntos más atractivos de Williamsburg, especialmente sus murales y grafittis. Algunos son realmente famosos, como la Mona Lisa,  en el cruce de calles Bedford Avenue, Broadway y South 6th Street.MONA LISA, DOS BARRIOS

Otro de los más fotografiados, es el del artista brasileño Kobra, donde une a Andy Warhol con Basquiat vestidos como boxeadores. Está en 147 Bedford Avenue, en la esquina con N 9th St y no te lo puedes perder.

p1100562 e1434686075203

No solo de murales vive el hombre, hay decenas de galerías de arte y puestos callejeros donde comprar obras con el artista a pie de calle. Abundan los mercadillos en los que se pueden encontrar muchas cosas interesantes, así que toca pasear  y comparar.

PARQUES

En el Marsha P. Johnson State Park,  los sábados de junio a octubre podrás disfrutar de uno de los mejores mercados de NY, el Smorgasburg. Esta maravilla, que funciona en varios distritos, es un magnífico sitio donde comer sobre la hierba con las mejores vistas de Manhattan. Pero no solo eso, aquí encontrarás una enorme variedad de alimentos de todo el mundo, como corresponde al top del cosmopolitismo. No te cuento más, solo debes ir y pasártela bien en este Woodstock de la comida.

smorgasburg

Otro parque muy interesante es el Domino Park, que se construyó reutilizando estructuras industriales de una antigua fábrica de azúcar. También al lado del East River y con sus propias vistas espectaculares, es perfecto para ir a refrescarse en verano, cuando aprieta el sol neoyorkino.

COMER Y BEBER

Además del Smorgasburg, abundan en el barrio los restaurantes de todo tipo, algo habitual en NY donde confluyen tantísimas culturas diferentes. Vale la pena echar un vistazo a  Berry St., una calle con gran variedad de locales para cenar y muchísimo ambiente.

En Brooklyn hay una larga tradición cervecera, debida sobre todo a la inmigración alemana y austríaca asentada por esta zona. Encontrarás muchos pequeños establecimientos donde catar cerveza artesana, pero no puedes dejar de ir al templo mayor de los cerveceros: Brooklyn Brewery, una de las más famosas de USA.

brooklyn brewery, en los dos barrios

COMPRAS

Si eres un entusiasta de la ropa vintage y te encantan las tiendas de segunda mano, has encontrado el paraíso. Eso no quiere decir que sea barato, más bien todo lo contrario, pero por curiosear aún no cobran nada.

También es un lugar fantástico para los amantes de la música, sobre todo indie, ya que grandes grupos de este estilo han nacido en Williamsburg. Muchas tiendas ofrecen conciertos en vivo, como por ejemplo Pete’s Candy Store (709 Lorimer St), The Glasslands (289 Kent Ave) o Sound Fix (110 Bedford Ave).

EL BARRIO JUDÍO ORTODOXO DE WILLIAMSBURG

Al sur del puente se extiende el segundo de los dos barrios, en el que vive una de las más numerosas comunidades de judíos ultra ortodoxos. Normalmente, los turistas pasan por aquí en autocar y no se mezclan con los vecinos, pero es mucho más interesante darse un paseo por sus calles y tomarle el pulso directamente.

familia judía en sabbath

Se trata de una comunidad jasídica de la dinastía Satmar, de origen húngaro, completamente cerrada al mundo exterior y con sus propias costumbres. Si aún no la has visto, te recomiendo la miniserie de Netflix, Unorthodox, te diría que casi imprescindible antes de visitar esta parte de Brooklyn.

Está basada en la biografía de Deborah Feldman, una mujer que vivió y escapó del sistema rumbo a Berlín, desmenuzando con detalle el complejo entramado de la vida en la comunidad. Una de las más numerosas y conservadoras del mundo, completamente impensable en un entorno como el neoyorkino, pero real.

¿QUÉ VER?

Al igual que en la zona hipster, una avenida principal vertebra el barrio, Lee Avenue, pero se parece poco o nada a Bedford Av. Aquí todo es más desangelado, con fachadas poco cuidadas, negocios austeros y ventanas enrejadas. Lo que llama la atención son sus habitantes, que van deambulando de un lado a otro, normalmente en grupos de hombres o mujeres por separado.

La vestimenta de ellos es oscura, llevan sombrero o kipá (una gorra pequeña en la coronilla), y sus largos trajes de diario se llaman rekel. Cuando llega el día festivo, Sabbath, suelen cubrirlo con un abrigo de seda más elegante (bekishe), y los sombreros pueden ser de pelo. Se ven muchas barbas y los característicos tirabuzones en las sienes, que se dejan crecer desde pequeños, llamados payot.

judíos ortodoxos en los dos barrios

Las mujeres, por su parte, visten con colores apagados, faldas debajo de las rodillas, medias durante todo el año y mangas hasta el codo. Notarás que muchas de ellas llevan peluca (sheitel), eso significa que ya están casadas y la tradición obliga a afeitarse completamente la cabeza. También pueden cubrírsela con pañuelos o sombreros, e incluso con las tres cosas a la vez.

Muchos asocian a la comunidad judía con los diamantes y el dinero, pero no es el caso de ésta. Un gran porcentaje de hombres se dedica al estudio de la Torá, y son las mujeres las que salen a trabajar para ganar el sustento de la familia.

Que, por otra parte, suele ser muy numerosa. Los matrimonios, normalmente concertados por los padres, se llevan a cabo a edades muy tempranas, sobre los 18 años y los hijos llegan rápidamente. Verás que casi todas las mujeres van por la calle con un montón de niños pequeños (no son raras las familias con 8 o más hijos), y abundan los carritos de bebé.

carritos barrio judio

El papel de la mujer en esta comunidad tan cerrada, es ciertamente difícil de entender desde fuera, ya que salvo raras excepciones, no se les permite acceder a educación superior. Están completamente supeditadas a los hombres y a la ley sagrada que rige sus vidas.

Te recomiendo recorrer el barrio sin prejuicios, como un ejercicio para ver y comprobar cuán diferentes podemos ser según nos hayan educado. Siempre ten en cuenta que ellos están en su casa y a nadie le gusta sentirse observado, algo que los turistas  no siempre tienen en cuenta.

Hasta aquí mi pequeña guía sobre los dos barrios de Williamsburg, tan cercanos y tan diferentes.

Tan neoyorkinos.